24/09/2017

Llegamos a Varano con una buena ventaja de 23 puntos a falta de cuatro carreras. Aún nada definitivo, pero inmejorable posición teniendo en cuenta que me había pasado medio campeonato remontando puntos.

  El primer contratiempo había sido que esta carrera estaba programada en Rijeka (Croacia), circuito que conocía y que se me da bien, pero al parecer no hubo confirmación de asistencia por muchos pilotos y se sustituyó por un circuito "de casa" para muchos.

Carrera 2 (el desastre)

 Aunque esta vez yo salía desde la pole, Tarani volvió a hacer una gran salida y me adelantó en la primera chicane. Le seguí y conseguí pasarle en la segunda chicane pero algo no iba bien en mi coche. Hacía un ruido raro al acelerar y al cambiar de marcha, una especie de "crac-crac" que finalmente se convirtió en un "crack" con todas las letras.

Al pasar la primera chicane el coche partió la cadena de transmisión y perdí el control del tren trasero, yéndome fuera. Intenté volver a pista pero ya iba empuje, así que me fuí a una escapatoria y allí me quedé, agarrado al volante, totalmente impotente.

EL SUEÑO DE FLAVIO

Lo primero que hay que aclarar es quien era Flavio di Bari, un piloto que cuando conoció los Predator's se hizo incondicional de ellos, convirtiendose en uno de sus impulsores y en gran amigo de Corrado Cusí, creador de la máquina.

Tras varias ediciones pudo ver como el campeonato se asantaba y crecía, pero no llegó a verlo en su máximo explendor. Corrado Cusí instauró un premio en memoria de su amigo perdido que se viene dando desde entonces al mejor piloto amateur (no es exactamente rookie porque si un piloto tiene experiencia en Fórmula se considera Pro directamente, como es el caso este año de Stefano Vandone o Salvatore Lioti).

Aparte de eso han venido dando un premio a ciertos pilotos entusiastas del campeonato llamado "Memorial Flavio di Bari". Este año era la décima edición.

Estaréis pensando que me lo dieron a mí. Pues sí... y no. Nos lo han dado a toda la familia por nuestra dedicación y actitud en las carreras.

No sabíamos nada y fue toda una sorpresa recibir el premio, a la vez que un gran honor. Nos lo entregó la familia de Flavio junto con Luciano Passoni, gran comentarista deportivo que nos hizo entrega del libro "Melegnano Motori" dedicado por los autores, él mismo y Domenico Parrotta, dos enamorados del mundo del motor que llevan años recopilando información sobre todas las competiciones llevadas a cabo en Motor Valley (es un libro muy bonito lleno de fotografías de distintas épocas, recortes de prensa, estadísticas... una joya).

Es una copa que nos llena de orgullo, así que le hemos reservado un lugar en la entrada de casa para que sea de las primeras cosas que vea cualquiera que venga a visitarnos.

En nombre de toda mi familia Machado-Pérez

GRACIAS

El día seguía claro, pero para mí el cielo soleado se había convertido en nubarrones de tormenta. Era como cuando vas ganando al parchís o al palé y mandan tu ficha a la casilla de salida. Si Tarani ganaba (que ganó) mi parcial de +5 se transformaba en -20.

No estaba nada perdido, aún iba por delante, pero 3 puntos no son nada cuando del primero al segundo hay 5 de diferencia. Todo quedaba pendiente de la última prueba. Quien ganase se llevaba el campeonato.

Una clasificación loca

En cuanto a participación el cambio fue un éxito, porque tuvimos una buena parrilla en Predator's, pero nos mezclaron con los Formula Junior que tienen distinto paso por curva y bastante velocidad en recta. Unos treinta coches en pista calificando. A mí me resultó prácticamente imposible hacer una vuelta, porque cada vez que venía haciendo vuelta había una bandera roja... alguien trompeado... suciedad en la pista...

Terminé en un cuarto puesto (y menos mal), teniendo por delante nada menos que a Masci, Tarani y Espadini.

Carrera 1

En salida Tarani hizo una buena salida poniéndose al mando de la prueba, con Masci segundo, Espadini tercero y yo manteniendo la cuarta plaza. No quería esperar demasiado para intentar pasar si no quería que Tarani pudiera escaparse, así que lo intenté en la primera vuelta pasando en una curva amplia por el interior a Espadini. Tuvimos un ligero toque aparentemente sin conseuencias. El coche iba bien y más tarde pude pasar a Masci y perseguir a Tarani a quien pasé en la chicane de las curvas 2-3 por el exterior. Desde ahí tiré para llegar con algo de ventaja.

Aumentaba mi ventaja en el campeonato a 28 puntos. Con acabar segundo en las tres carreras restantes me valía. Sin embargo como ya anticipa el título del artículo la competición no siempte se lleva bien con la calculadora...

En el "intergara" revisaron mi parte trasera por si acaso pero lo vieron todo en orden y no cambiaron nada.

 Todos los sinsabores fueron menos porque tuvimos una grata sorpresa con un premio inesperado: "Memorial Flavio di Bari".

Por lo demás el resto de esta columna debería ser para explicar el resto de mi carrera, pero como terminó demasiado rápido solo se me ocurre poneros una foto de la cadena rota.