Carreras bajo el diluvio en Cremona

Jugándolo todo a una sola carta...

 

LAS CLAVES

Lo primero que hay que dejar claro es que el primero y principal factor fue la suerte, porque en esas condiciones de pista pude trompear mil veces y con una sola vez hubiera bastado para perder la carrera o incluso quedarme fuera. Afortunadamente cada vez que el coche hizo aquaplanning pude controlarlo.

Por otra parte, al ver que en clasificación palmábamos más de un segundo cualquiera podía pensar que estaríamos desanimados, pero había varias cosas que nos hacían ser muy optimistas de cara a carrera.

Uno de ellas, como dijimos, era la presión de las ruedas. Sabíamos que las llevábamos mal en clasificación y que eso nos producía demasiado deslizamiento. Solo con cambiarlas sabíamos que ganaríamos al menos tres o cuatro décimas. La primera carrera en realidad no las tocamos pero cambió la pista, que viene a ser lo mismo, y ya estaban bien, y para la segunda sí las cambiamos porque había más frío y mucha lluvia. Acertamos.

El segundo punto era que sabíamos que en la última vuelta de clasificación venía mejorando nueve décimas, porque a medida que rodaba en agua iba cogiendo confianza y apurando más. Ese crono no aparecía oficialmente por haberse hecho ya fuera de tiempo, pero nosotros sabíamos que lo teníamos.

Muy importante tambien analizar los videos de la crono, donde se veían diferentes trazadas y zonas de frenada. En dos curvas donde perdíamos tiempo conseguimos localizar zonas de frenada fuera de la goma (la goma en agua patina mucho) para poder apurar mucho más la frenada y también mejores zonas de aceleración para traccionar mejor. Ahí había también buenas décimas.

Todo eso nos daba además el factor sorpresa: habíamos clasificado a un segundo y una décima de Tarani, pero estimábamos una mejora total de segundo y medio por vuelta que nadie sabía que teníamos. No se trataba de ninguna estrategia previa, sino más bien algo casual, pero no dejaba de jugar a nuestro favor.

 

05/11/2017 Tras el abandono en la segunda manga del 5º round llegábamos a Cremona con solo 3 puntos de ventaja. Si Danielle Tarani ganaba las dos carreras se llevaba el campeonato.

El sábado rodamos poco para no gastar neumáticos, ya que el tiempo estaba seco pero al día siguiente daban mucha agua todo el día y necesitaríamos que las ruedas tuviesen el máximo dibujo posible.

Estuvimos discutiendo con los mecánicos qué presión poner y finalmente decidimos mantenerla igual para la carrera 1 porque paró de llover casi del todo (seguía chispeando y con charcos, pero mucha menos agua). Creo que acertamos de pleno.

El coche se sentía mucho mejor que en clasificación y pudimos presionar a Daniele varias vueltas e incluso hacer una tentativa de adelantamiento al final de la contrarecta, por el interior, aunque aguantó bien la posición.

 "Mi estrategia era doble: como salía en pole intentaría tirar, pero si Tarani me lanzaba un ataque debía abrirle la puerta y ponerme a su rueda, pues habiendo ganado la primera carrera me bastaba llegar segundo para ganar el campeonato"  Apareció un safety y todo se reagrupó. En el relanzamiento me veía con fuerzas para seguir a Daniele e hice una prueba en el mismo sitio por fuera. Esta vez sí salió bien. Aguanté por fuera y llegué por dentro a la siguiente, saliendo primero a la recta de meta con Tarani pegado. Pasé bien la curva 1 y Tarani sufrió un trompo. A partir de ahí procuré ir rápido pero sin arriesgar demasiado. No podía desperdiciar una oportunidad como esa, así que regulé la ventaja, yendo rápido pero sin apretar a tope para evitar fallos y ganar la carrera 1. El campeonato estaba mucho más cerca.

La clasificación

 Al día siguiente en el warm up en seco fuimos los más rápidos. Hubiésemos preferido algo de lluvia para "catar" la pista en esas condiciones, pero no cayó ni una gota. En cambio en clasificación cayó el diluvio.

En una pista totalmente encharcada y con mucho spray hicimos una buena clasificación, de menos a más, ganando confianza y mejorando en cada vuelta. La penúlltima vuelta marcábamos nuestro mejor tiempo, a más de un segundo de Tarani. La vuelta siguiente íbamos mejorando mucho. No habría sido suficiente pero nos habríamos quedado mucho más cerca.

Carrera 1

Salíamos en segunda posición tras un intratable Tarani que nos metía más de un segundo, en parte por un error en la presión de los neumáticos (no esperábamos que lloviese tanto y las llevábamos claramente bajas de temperatura).

Carrera 2

 La pista había enfriado después del mediodía y estaba volviendo a llover fuerte así que esta vez cambiamos las presiones. Mi estrategia era doble: como salía en pole intentaría tirar, pero si Tarani me lanzaba un ataque debía abrirle la puerta y ponerme a su rueda, pues habiendo ganado la primera carrera me bastaba llegar segundo para ganar el campeonato. La organización hizo intercambiar los carburadores entre los dos primeros (por lo visto es algo que suele hacerse, yo no lo había visto nunca) y así lo hicimos.

 La salida volvió a ser tras el safety y esta vez ralenticé la marcha para pegar un tirón justo antes de la última curva. Salí bien. Tarani me seguía, tomando bastante riesgo. Yo también tuve algunos momentos delicados pero conseguí enderezar el coche. La pista estaba muy difícil pero el coche iba muy asentado, me daba confianza para apretar. Tarani aún me seguía cerca pero saqué beneficio de los doblados pasando a alguno justo antes de la zona de curvas y eso me dió el aire necesario para llegar a meta y celebrarlo de la mejor manera: nada más pasar meta atravesé el cesped y me paré en el pit lane. Erik vino con una bandera de España y me dí una vuelta con ella para terminar haciendo unos trompos justo antes de meterme a parque cerrado.

Dentro entrevistas, felicitaciones, abrazos, besos, trofeos y champán. Trabajo terminado de la mejor manera, ganando.